Miedo y entendimiento

Estás en medio de la selva tupida, húmeda y pegajosa. Las gotas de sudor empapan todo tu cuerpo y escuchas unas ramas romperse en el suelo más cerca de lo que quisieras. Vuelves la vista inmediatamente y te encuentras frente a frente con la pantera negra. ¿Sientes miedo?
Toda mi vida hasta hace aproximadamente dos años, he creído que el miedo era necesario. Pensaba que era una forma de defensa para protegernos de todo mal y de las panteras que nos atacan, una manera de activar nuestras glándulas y hormonas para reaccionar ante la parálisis y mantenernos vivos. Pero no es así.
Hay que diferenciar dos conceptos; el miedo y el entendimiento. Si estás frente a un fuego y no metes la mano dentro, no lo haces porque tengas miedo, sino porque sabes que si tocas el fuego te quemas. Tienes control, tienes entendimiento pero no miedo -situación bastante ideal-. De la misma manera y volviendo a la pantera, cuando estás frente a frente con una fiera no es el miedo el que te impulsa a escapar, sino el conocimiento de que te puede comer.
El miedo es una reacción física originada por la mente que te paraliza y nubla el ser. Como con todas las reacciones de la psique, es bueno intentar tomar el control, por eso hacemos yoga, para obtener el control. Eso requiere práctica y mas práctica. Lo que está claro es que todos tenemos nuestro propio entendimiento, y por eso hay gente que escala verticales de 1km sin ningún tipo de sujeción, y otras que no pueden subirse a un taburete sin que les dé respeto.
En un estado evolucionado, ya somos capaces de observar nuestros miedos, en el siguiente superior nuestros miedos ya no nos limitan en nuestras actuaciones. Un estado muy elevado consiste en diferenciar perfectamente miedo y entendimiento -como cuando lo hacemos ahora con una hoguera-. Ayuda a entender el concepto, imaginar a nuestros antepasados de hace 1,7 millones de años en presencia del fuego, probablemente sintieran mucho miedo y poco entendimiento. Y ahí es donde no queremos estar.